Escucha con las dos orejas....

domingo, 25 de marzo de 2012

Carta a Antonio Banderas

Ayer por la noche, con un año de retraso, vi tu pregón de la Semana Santa del 2011, el de Antonio Banderas, lo vi completo… hasta ayer, solo había visto algún trozo que otro…

Hace algunos años, cuando aún podía mecer sobre mis hombros a María Santísima de la O, pasaba por calle Larios, y en un balcón del Hotel Larios, desde mi varal A, podía verte… Antonio Banderas, con Melanie y su niña chica… Y pensaba yo: “hay que estar loco o amar mucho a tu tierra, pá meterse en estas bullas con una guiri y una niña chica… y más siendo famoso…”

Sí, Antonio, hay que querer mucho a nuestra tierra, a Málaga, de la que siempre hablas bien, de tus raíces… y si antes te defendía, porque se te llena la boca cuando hablas de nuestra tierra, hoy me siento enamorado de ti… de tu sencillez, a pesar de Hollywood, de la fama y el dinero… ¡Qué peazo de pregón!
Aquí os dejo el enlace, pa que disfrutéis como yo… si eres malagueño, si te gusta la Semana Santa, si aún te queda algo de sentimiento… siéntate y escucha al único que tuvo “cohones” de pedirle a una azafata, en un vuelo a Los Angeles, “un limón con sal y unas torrijas”. Disfruta de Lola, la que ve con el corazón, de Carmen, la penitente del Cautivo, de Gregorio en su submarino de La Esperanza, de Pablito, el canijo del bombo, de D. Amadeo, filósofo y tradicional nazareno del Sepulcro… y oye el rumor de la saeta que Vaquerito entonó en Méndez Núñez al “Moreno”, el Cristo de Los Gitanos…
José Antonio Domínguez Banderas… MALAGUEÑO…
…Y no como otros que se fueron, de putas, a Francia y jamás volvieron, ni a su tierra, ni a sus raíces…

 
 

domingo, 4 de marzo de 2012

"La desbandá"


"La desbandá" es un libro de Luis Melero, que relata una parte de la historia de Málaga en una época, que por suerte, mi generación y la de mis hijas no vivimos, pero que no está tan lejos, pues nuestros padres y abuelos sí que la vivieron.
Transcurre en los años 1935 y 1936, en una Málaga empobrecida y castigada, donde había que buscarse la vida para luchar contra el hambre y contra los hombres y sus ideales... "El Chafarino" un pescador ciego que habitaba una choza de cañas se dirije al protagonista "El Mani" y le dice así:

"La barbarie de los hombres es un reflejo pálido de la barbarie de los cielos. Hagan lo que hagan los humanos, hasta lo más monstruoso, es insignificante comparado con lo que hacen los dioses. Hubo un tiempo en que conducían a toda la Humanidad al holocausto; hacían arder el firmamento; inundaron muchas veces toda la Tierra para exterminar a los hombres. Y estas playas han sido testigos innumerables veces de su furor. Ya véis lo tranquilito que la mar es aquí y sin embargo, yo he visto olas tremendas que desmoronaban los acantilados y los espigones como si fueran de harina. Porque en esta bahía hay algo que les enfurece. Esta ciudad sobrevive a duras penas bajo las iras divinas y el desprecio rencoroso de las capitales que las rodean y es que, de acuerdo con la lógica, Málaga no debería existir; es una rareza a medio camino entre el Edén y el infierno que perturba tanto a los dioses como a los humanos. Hubo un político malagueño el siglo pasado, llamado Cánovas del Castillo, que cuando le transmitía el poder a su rival, Sagata, cosa que ocurrió muchas veces, le decía: "Te entrego el poder de España, menos el de mi provincia, porque a ésa no hay quien la gobierne. Los reyes han pasado por aquí muy pocas veces y de puntillas, sin escucharnos porque le damos miedo. Y lo incompresible es que los dioses ayudan a los reyes desatentos y a los vecinos envidiosos. Esta ciudad ha sido destruida montones de veces por los piratas y muchos de vosotros descendéis de piratas, vikingos inclusive, pero tales destrucciones no fueron nada comparadas con las plagas terribles y las calamidades que se han cebado con nosotros. No hace dos siglos en 1756, la peste estuvo a punto de acabar con la población, y también en 1805 la peste nos arrasó, y en 1810 Napoleón incendió completamente la ciudad y pasó a cuchillos casi todos sus habitantes y hace menos de 40 años que la filoxera devoró nuestra principal riqueza las viñas, y hace 28 años, en 1907, hubo una riada loca que arrasó toda Málaga. Poco después, sufrimos más que nadie por lo de Marruecos. Y en 1931, perdimos nuestro patrimonio artístico y nos volvimos pobres de solemnidad. Ya toca de nuevo. Si no es una ola, será un terremoto, pero algo viene a aniquilarnos".

Málaga, envidia de muchos, y pese a bárbaros y dioses..."Ciudad del Paraíso"